¿Máscara?
Despierto y me encuentro en un lugar oscuro. ¿Cómo lo sé? No tengo idea; pero así es. No veo nada; pero noto límites…
Por fin… Recuerdo la fiesta de disfraces: era o es… Carnaval.
Los amigos que me hicieron beber más de la cuenta, y yo que accedí porque sino me llamarían ‘Cortado sin leche’.
Las chicas reían, y no sé si eran guapas con tanto maquillaje, purpurina y sus máscaras, por supuesto. Iban con poca ropa… ¿Y su alma?, ¿desnuda o no?
Siempre he sido un tío con poca personalidad, lo reconozco. Hacen de mí lo que quieren, ellos y ellas.
…Trato de empujar a mi alrededor al intentar recordar; pero es como si no hubiera solidez; aunque debe haberla…
Me emborraché y creo que me acosté con varios a la vez: me dijeron que probara: me iba a gustar.
Creo que me gustó demasiado, todo; pero hay algo dentro de mi cabeza que me aprieta los recuerdos para no dejarlos salir de golpe…
…Ahora recuerdo sangre: mucha sangre a mi alrededor.
Y…
Pienso en las máscaras: no todos se las quitan durante el resto del año…
Después de lo que me parece un tiempo sin tiempo, me doy por vencido: soy yo. Un asesino que va de inocente por la vida. Estoy en mi cabeza: soy consciente, me he escondido otra vez, para no serlo por un rato.
Sólo me pregunto… ¿a cuántos maté esta vez? Por curiosidad.
Mi aportación al reto de febrero del Blog de JascNet:
Guau, muy bueno Natalia.
ResponderEliminarEl asesino que habita en la mente de alguien que se cree normal.
Genial, me ha gustado mucho.
Muchas gracias por tu asiduidad al VadeReto.
Un abrazo.
Gracias a ti!
EliminarDesde hace un tiempo me 'hace gracia' pensar en la de gente que hay con máscara tras el Carnaval...
Hasta la próxima!
Este relato me ha gustado. Quizás si lo desarrollas puede ser el inicio de una historia 🙃
ResponderEliminarJijiji... No me da la vida, como dicen actualmente!!!! Pero... Gracias otra vez!!
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